En 1901-1902, el abad Breuil es uno de los principales responsables del debate sobre el reconocimiento del arte parietal que finaliza durante el congreso de la AFAS de Montauban y que hará del estudio de las cuevas ornadas uno de los temas más importantes de la arqueología prehistórica del siglo XIX. Así, es en calidad de especialista francés incontestado del arte de las cavernas que Breuil es invitado a evaluar la cueva de Lascaux, el 21 de septiembre de 1940. Se encuentra entonces de pasada en Brive, en casa del abad Bouyssonie, preludio de un viaje que le conducirá, durante varios años, a Portugal y después a Sudáfrica. Por estas razones, Breuil interviene muy poco en Lascaux : si realiza, al día siguiente de su visita, el dibujo a través de calcos de los grabados del Divertículo de los Felinos, confía la realización de los levantamientos manuales y fotográficos a colaboradores. Breuil considera sin embargo Lascaux como un descubrimiento de gran importancia, lo que expresa en sus Quatre cents siècle d’art pariétal (Quatrocientos siglos de arte parietal), obra publicada en 1952, el mismo año en que confía el estudio de Lascaux al abad André Glory.

COYE (Noël) dir. – Sur les chemins de la préhistoire, l’abbé Breuil du Périgord à l’Afrique du Sud, Paris, Somogy Éditions d’Art, 2006, 224 p., 201 ill.